Campaña THRIVE
Pro-Choice Arizona lanzó la campaña THRIVE en 2021 en respuesta a la SB 1457, una amplia ley contra el aborto. Este proyecto de ley intentó establecer la personalidad fetal, creó aun más obstáculos para los proveedores y prohibió que alguien buscara un aborto por razón a una anormalidad genética del feto.
Lanzamos esta campaña en 4 condados rurales que consistían en carteleras y anuncios de radio, dirigidos a condados oscilantes sobre la base de las elecciones de 2020. Trabajamos con las artistas locales Lucinda Hinojos y Stephanie Guillermina Castro para crear el arte de la campaña.
Aunque la campaña ha terminado, esta página se actualiza ocasionalmente con cambios en las leyes, estadísticas y nueva información.
Todos merecemos prosperar, sin importar si decidimos hacer crecer nuestras familias y en qué forma.
Ya sea que desees una familia, que ya tengas hijos o sepas que no estás lista, tener acceso a los servicios de aborto en nuestra comunidad nos da poder sobre nuestro propio futuro.
Decidir si, cómo y cuando hacer crecer nuestra familia es una de las decisiones más importantes que tomamos en la vida. Cuando todos los servicios de salud reproductiva están disponibles y son asequibles, podemos hacer lo mejor para nosotros y para quienes amamos. Con los recursos y el apoyo adecuados, todos podemos prosperar.
¿Qué es la justicia reproductiva?
La justicia reproductiva es el derecho humano a mantener la autonomía corporal personal, tener hijos, o no tener hijos y criar a los hijos que tenemos en comunidades seguras y sostenibles (según lo define SisterSong). Cuando el gobierno de Arizona aprueba políticas y leyes que dictan y restringen lo que podemos hacer con nuestros cuerpos y cómo debe hacerse, perdemos nuestra autonomía corporal—la libertad de decidir qué es el correcto para nosotros.
La justicia reproductiva no solo se limita al control personal sobre nuestro cuerpo físico, sino que también se centra en los ambientes y comunidades en las que criamos a nuestras familias. Cuando nuestras ciudades son económicamente inestables y carecen de oportunidades de empleo con salarios justos y beneficios de salud, luchamos para ganar el sustento y mantener a nuestra familia. No podemos cuidar nuestra salud y bienestar de la manera que merecemos. Las personas de color enfrentan barreras adicionales debido a las desigualdades raciales sistémicas. Las comunidades de personas nativas americanas, Latinxs y personas de raza negra tienen las tasas de pobreza más altas de Arizona.
Es hora de acabar con el mito de que el aborto es solo un problema de las mujeres.
El acceso a abortos legales y seguros impacta a todas las personas, incluyendo las familias, las parejas, los amigos, los niños y las comunidades. Llegar a una cita para servicios de aborto no debería ser un proceso agotador. Necesitamos trabajar para cambiar las políticas que crean barreras para acceder a los servicios de salud. Necesitamos cambiar la narrativa que estigmatiza a las personas que eligen el aborto. Cualquier persona con útero que puede quedar embarazada, incluyendo las personas no-binarias, trans, LGBTQ+ y las mujeres, especialmente las de comunidades marginadas, son las más afectadas por las leyes restrictivas y las barreras para acceder a los servicios de salud.
1 en 4
Personas tienen un aborto en sus vidas
49%
Personas que nos han llamado y que han viajado a otra ciudad o estado para obtener un aborto
73%
Personas que llaman al Fondo de Aborto de Arizona que ya tienen hijos
62%
Pacientes de aborto que tienen alguna afiliación religiosa
40%
Las personas que buscan un aborto porque no pueden pagar el costo de tener un hijo
Las personas en Arizona enfrentan algunas de las leyes de aborto más restrictivas del país:
- Prohibición de aborto después de quince semanas. 
- Cita de consejería obligatoria y ultrasonido. 
- Período de espera de 24 horas entre el ultrasonido y el procedimiento. 
- Solo los doctores médicos pueden realizar abortos y administrar medicamentos. 
- Prohibición de telemedicina para medicamentos de aborto. 
- En 2021 una nueva restricción entro que prohíbe el aborto por razones de anomalías genéticas. 
Durante los últimos años, estas políticas restrictivas han provocado el cierre de clínicas en todo el estado. En la actualidad, solo tenemos siete clínicas que brindan servicios de aborto en Phoenix y Tucson.
Las restricciones y barreras afectan a los pacientes que llaman al Fondo de Aborto de Arizona todos los días. Incluso si pueden pagar el procedimiento, también necesitan quedarse de una a tres noches debido al período de espera obligatorio, lo que agrega los costos de viaje y alojamiento para cualquier persona que no vive cerca de una clínica. Además de eso, es posible que tengan que buscar un servicio de cuidado de niños si ya son padres y pedir un permiso de ausencia sin sueldo. Las cargas logísticas y financieras creadas por estas barreras son más de las que mucha gente puede pagar.
Las personas embarazadas en las áreas rurales de Arizona carecen de todo tipo de recursos
El aborto no es la única forma de salud reproductiva que les falta a las embarazadas que viven en áreas rurales. Un estudio reciente del Centro de Salud Rural de la Universidad de Arizona encontró que ocho condados tienen menos de diez ginecólogas disponibles, mientras que dos no tienen ningún acceso a los servicios de salud de obstetricia ni de salud materna.
Si una persona que vive en un área rural de Arizona no puede acceder a los servicios de salud reproductiva necesaria para poner fin a un embarazo no deseado, también es muy probable que tenga acceso limitado ni ningún acceso en lo absoluto a los servicios de salud prenatal y de posparto. Esto puede provocar complicaciones o situaciones peligrosas tanto para la persona embarazada como para el feto. Agregar más restricciones a la salud reproductiva solo empeora las cosas.
El futuro del acceso al aborto en Arizona
Los legisladores en Arizona y en todo el país han promulgado leyes que afectan a las personas de manera diferente según el lugar donde viven y quiénes son. Mucha gente en Arizona ya luchan sin acceso a una clínica, no pueden pagar un aborto y se ven obligadas a continuar con sus embarazos debido a barreras geográficas, económicas, raciales y legales.
Es por eso por lo que estamos construyendo un futuro en el que todas las personas en Arizona, sin importar quiénes seamos o dónde vivamos, tengamos el poder, los recursos y el apoyo para obtener servicios de aborto y prosperar con familias y comunidades felices, seguras y saludables.
Para lograr esto, vamos a tener que trabajar todos juntos. ¡Únete a nosotros!
 
                        